Uno de los órganos más fascinantes de nuestro cuerpo es, sin lugar a dudas, el cerebro. Se trata, además, de un órgano que, a día de hoy, sigue siendo muy desconocido y que, a cada descubrimiento que realizamos, nos resulta más perfecto y sorprendente. Gracias al cerebro podemos realizar todas nuestras actividades diarias, comprender el mundo y relacionarnos en él. Pero, no solo nos permite disfrutar de la vida con los ojos abiertos sino que, también, cuando los cerramos continúa trabajando y recreando otras situaciones y escenas que bien podrían darse en la vida real.
En este artículo vamos a descubrir mejor el funcionamiento del cerebro indicándote por qué soñamos cuando dormimos. Una de las grandes incógnitas de nuestro cuerpo humano y que ha causado grandes debates entre filósofos como fue el conocido caso de Sigmund Freud.
Si quieres saber por qué soñamos cuando dormimos es importante que conozcamos qué ocurre en nuestra mente cuando dormimos. A diferencia de lo que pensamos normalmente, dormir no significa estar inactivos sino que es una actividad más de nuestro sistema nervioso. Durante las horas de sueño, nuestro cuerpo equilibra el organismo, las células se regeneran y nuestros músculos y huesos reposan. Es decir, la parte «material» del cuerpo requiere de este descanso pero el cerebro sigue trabajando, de forma diferente, eso sí.
Durante toda la noche podemos tener diferentes tipos de sueños pero, también, pueden haber momentos en los que no soñemos. El mero hecho de dormir no implica soñar sino que, dependiendo de la fase del sueño en la que nos encontremos, podemos recrear este tipo de pensamientos o no.
Además, no siempre somos capaces de recordar los sueños que hemos tenido durante la noche. Por lo general, tan solo recordamos aquellos que acabamos de tener (justo antes del despertar) o aquellos que nos han podido alterar (por ejemplo, las pesadillas, los sueños angustiosos, etcétera).
¿Qué pasa en nuestro cerebro cuando dormimos?
Durante las horas de sueño, nuestro cerebro se activa casi de forma completa. Es decir, está más activo durante las horas de descanso que durante el día y, por ello, necesitamos que el flujo de sangre sea el doble del que usamos cuando estamos despiertos.
Pero es cierto que hay una parte del cerebro que no funciona cuando dormimos: el centro de la lógica. Y es precisamente por eso por lo que los pensamientos que acuden a nuestra mente, nuestros sueños, suelen formar parte de un mundo más onírico y que no tiene por qué guardar relación con la realidad.
Además, tienes que saber que nuestro cerebro también envía mensajes a nuestro cuerpo para que, durante el sueño, no se active ni reciba esos mensajes como reales. Para ello, el cerebro envía una serie de señales a la médula espinal que tienen como objetivo paralizar nuestro cuerpo. Este es el motivo por el que podemos estar viviendo una gran cantidad de aventuras con los ojos cerrados pero, nuestro cuerpo, permanece completamente inmóvil. La única parte de nuestro cuerpo que se mueve durante el sueño son los ojos que se activan cuando entramos en la fase que se conoce con el nombre de REM.
Por qué soñamos cuando dormimos – El porqué de los sueños
La función de los sueños
Ahora que ya sabes que nuestro cerebro está mucho más activo de noche, vamos a continuar este artículo sobre por qué soñamos cuando dormimos hablando de la función que tiene el hecho de soñar. Durante este momento del día, nuestro cerebro hace una tarea muy importante para nuestra memoria: desechar y seleccionar recuerdos. Esta tarea de «almacenar» la información es de la que se ocupa nuestro órgano cuando nosotros estamos con los ojos cerrados.
Además, durante el momento del sueño, nuestro cerebro se encarga de intentar solventar los problemas o complicaciones que nos hayamos encontrado durante el día. Por ello, es importante dormir bien y descansar por las noches para que, así, al día siguiente toda la información pueda haber sido procesada, seleccionada y resuelta. En este otro artículo te contamos cómo afecta la falta de sueño a nuestro cerebro para que entiendas lo importante que es descansar bien.
Los sueños y nuestro subconsciente
Muchos estudiosos han estudiado la relación existente entre nuestros sueños y nuestro subconsciente. Uno de los padres de esta teoría fue Sigmund Freud quién, incluso, elaboró un diccionario con la interpretación de los sueños. Está claro que, en muchas ocasiones, los sueños o pesadillas que recrea nuestra mente son un reflejo de alguna preocupación o situación de nuestra vida cotidiana. Y, al no tener activada la parte «lógica», la forma de representación de este problema se sale de los límites de la realidad y se nos presenta de una forma metafórica y surrealista.
Soñar que se te cae un diente o soñar que te persiguen son sueños muy comunes y a los que se les ha dado infinitas interpretaciones. Es cierto que analizar los sueños puede ayudar a psicoanalizarte pero tampoco debemos tomarnos esto al pie de la letra. Hay algunos sueños que no tienen por qué interpretarse de forma psicológica, simplemente son evocaciones mentales.
¿Siempre soñamos cuando dormimos? NO
Ahora que ya sabes por qué soñamos cuando dormimos, tenemos que resolver otra duda muy común. Y es que, a diferencia de lo que muchas personas creen, no siempre que dormimos estamos soñando. Existen diferentes fases del sueño que se dividen en:
Fase NREM (o NO REM): es la primera fase que transcurre durante los 30 o 60 minutos primeros. Durante este momento nos encontramos en la transición entre el sueño y la vigilia y, además de en este primer momento del sueño, también se repite a lo largo de la noche. Durante esta fase, nuestros músculos se relajan y el metabolismo se ralentiza.
Fase REM («rapid eye movement»): la fase REM tiene una duración media de 30 a 90 minutos, después, volvemos a tener una fase NREM y continuamos con los ciclos del sueño. De forma cíclica se van repitiendo estas fases durante la noche, por tanto, podemos tener hasta 5 sueños distintos en la noche si dormimos 8 horas.
Como vemos, la diferenciación de ambas fases se ha establecido con el hecho de que nuestros ojos estén en movimiento o no. Tal y como hemos indicado más arriba, todo nuestro cuerpo permanece estático durante las horas de sueño. Todo excepto los ojos. Ellos son los indicadores de la actividad cerebral. Y es que durante la fase REM nuestro cerebro está mucho más activo y, por tanto, nuestros ojos reciben esta actividad con el movimiento. El cuerpo sigue relajado pero nuestra mente está más activa que nunca.
Por tanto, no siempre que dormimos soñamos porque si dormimos y no llegamos a entrar en la fase REM nuestro cuerpo no estará tan activo como para recrear sueños. Además, las personas que padecen insomnio y se van despertando durante la noche puede que estén constantemente en la fase NREM y, por tanto, no terminen de soñar.
Por qué soñamos cuando dormimos – ¿Siempre soñamos cuando dormimos? NO
¿Por qué soñamos cosas malas o tenemos pesadillas?
Durante el sueño podemos padecer lo que técnicamente se conoce como «sueño disfuncional» y coloquialmente conocemos como «pesadillas». Se trata de una alteración que tiene lugar en nuestro subconsciente y que puede ser un reflejo de que hay algo en nuestra vida que nos esté perturbando. Pero no siempre tiene por qué ser así.
Como ya hemos dicho, sí que puede haber una relación directa entre los sueños y nuestras emociones o nuestra vida, es lo que defiende el psicoanálisis de Freud. Pero también puede ser que las pesadillas aparezcan sin que exista alguna correspondencia con nuestro estado anímico. De hecho, puede ser que un sueño agobiante o de miedo tan solo ocurra porque acabemos de ver una película que nos ha alterado y nuestro cerebro solo repite lo que acabamos de ver.
De hecho, además de las explicaciones del psicoanálisis sobre los sueños, también hay algunos factores externos o físicos que pueden producirnos pesadillas, por ejemplo:
Ver una película de miedo o angustia antes de dormir
Estar enfermo y padecer subidas de fiebre por la noche
Vivir en un estado de estrés y ansiedad
Estar con depresión