Miguel Ángel Pla
Psicoterapeuta – Coach personal y ejecutivo
Teléfono: (81) 83 78 47 10
Para superar los problemas necesitas el poder interno y a su vez la capacidad de tolerar.
Tolerar no significa aguantar. Tolerar es aceptar, comprender y saber afrontar. Es decir, tolerar no es aguantar y luego explotar. En la tolerancia disuelves aquello que, de otra forma, estarías aguantando. Tolerancia es ser como el océano, es decir, saber absorber y disolver, hacer desaparecer.´
Puedes enseñar la lección de la tolerancia con dulzura, buenos deseos y sentimientos puros. Así no sólo avanzas tú, sino que eres una luz en el camino para que otros avancen también. Aprende a tolerar con bienestar. Estabilízate en tu ser interno y, desde esa calma, claridad y estabilidad puedes tolerar sin perder tu bienestar. Tolerar es aceptar, valorar, comprender y apreciar. No hacer una montaña de un grano de arena sino al contrario, llevar la expansión a la esencia.
La tolerancia ha de equilibrarse con la capacidad de afrontar, que se basa en la valentía, en el coraje y en la seguridad personal. Tener el poder de tolerar te da seguridad y confianza de que podrás, lo conseguirás, avanzarás. La tolerancia es necesaria para convivir, para ser y dejar ser.
Con la virtud de la tolerancia, continuarás sonriendo, nunca te desanimarás. Sonreír cuando alguien te alaba no es ser tolerante. Sin embargo, cuando alguien se convierte en un enemigo enfadado y te insulta, pero ya no tienes el más mínimo signo de desánimo en tu cara, ni siquiera en tus pensamientos, es tener tolerancia. Mirar, hablar y entrar en contacto con sentimientos de misericordia, es decir, de paciencia, comprensión, amor y respeto, con una persona con quien no tienes buena relación, es tener tolerancia.
Expandir los obstáculos y problemas en tu mente o hablar de ellos a los demás significa crear montañas. No entres en la expansión: pon el punto final y pasa página, así avanzarás. Una persona tolerante siempre es capaz de llevar la expansión, los problemas y obstáculos a su esencia con conocimiento, meditación y silencio. Cuando eliges el camino más largo, eso consume más y acaba agotando tu tiempo y energía. La expansión es el camino más largo y la esencia es tomar un atajo. Ambos sirven para cruzar al otro lado, pero gracias a que los que toman un atajo pueden ahorrar su tiempo y energía, no se desaniman.
Alguien que tenga el poder de la tolerancia nunca tendrá miedo ni pensará: «¿Por qué me sucede esto también?». Como está constantemente lleno, profundizará en el conocimiento y recuerdo de lo esencial en la vida. El que tiene miedo no es capaz de profundizar.
¿Decides tolerar o aguantar?