Miguel Ángel Pla
Psicoterapeuta – Coach personal y ejecutivo
Teléfono: (81) 83 78 47 10
Los conocidos saludan agitando la mano; los amigos se dan la mano, los familiares se abrazan, los que se aman se besan. Los saludos nos proporcionan maneras dinámicas de encontrarnos con el otro y demostrar afecto y respeto adecuados.
Cada saludo depende de la naturaleza y la cercanía de cada relación…
¿Sabías que puede decirse mucho sobre el estado actual de un matrimonio por la manera en que se saludan? Puede verse en la sonrisa de ella, se escucha en la voz de él y se percibe en la ternura del contacto físico. O en la ausencia del contacto.
Un saludo puede ser una prueba de fuego para la salud relacional. Piénsalo: Cuando saludas… ¿Lo haces con cariño? ¿O en forma indiferente? ¿Tu modo de saludar hace que tu pareja espere con ansias el momento de verte?
Hay muchas buenas razones para ser amables aun cuando los sentimientos se oponen y el amor es la mayor de todas. Aunque los saludos pueden reflejar lo que sucede en un matrimonio, también pueden transformarse en una inversión amorosa para su salud futura.
Tu saludo debería expresar: “Eres invalorable para mí” en lugar de “te tolero”
Un buen saludo prepara el terreno para una interacción positiva y saludable. Un saludo amoroso es algo que puedes regalarle a tu pareja todos los días por medio de lo que ve, oye y siente. No tiene precio y no cuesta nada.
Piensa en las oportunidades que tienen de saludarse regularmente y empieza a edificar con tu amor.
No tenemos garantizado el mañana, cada día con nuestra pareja es un regalo para atesorar y disfrutar.
Recuerda, el amor es una decisión así que decide comenzar a amar desde el ¡Hola!
