Miguel Ángel Pla
Psicoterapeuta – Coach personal y ejecutivo
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En las relaciones de pareja establecer los límites es decir lo que está permitido y lo que no, lo que te gusta y lo que no te gusta, es algo que debe darse desde el comienzo de la relación, pero lo que a veces ocurre es lo siguiente:
- Por miedo a no ser aceptado ser le permite al miembro de la pareja hacer todo lo que desee.
- No se le niegan las cosas entendiendo que lo hará sentir mal o herirá sus sentimientos.
- Sentir ansiedad en el momento de expresar sentimientos o inconformidad.
- Llegar incluso a negarse a sí mismo lo que siente y lo que le gusta y tratar de convencerse de que todo lo que hace su pareja es adecuado.
Todas estas conductas o emociones movidas por la necesidad de caer bien, de quedar bien y sobre todo de ser aceptado.
Pero en el futuro de esta relación llegara un momento en que ese miembro que busca esa aprobación y que no ha puesto límites comience a sentir un vacío y que las cosas no están marchando bien, así como también cuando la relación avance comience a ver que hay muchas cosas que le disgustan de la pareja y vengan las dudas e incertidumbre sobre si debe estar o no con esta persona.
Muchas veces este proceso ocurre cuando pasa la etapa del enamoramiento y ambos comienzan a verse realmente como son, se acerca el proceso de aceptación de la pareja tal y como es.
Establecer límites te permite diferenciarte de tu pareja, conservar tu integridad.
Para lograr establecer límites y así tener el respeto y la valoración por parte de tu pareja es necesario que tú seas capaz de:
- Reconocer que eres un ser humano único e individual: Tener claro quién eres, cuáles son tus gustos, tus capacidades, habilidades. Tener presente que el hecho de tener una pareja no significa que deber dejar de ser tú mismo para convertirte en alguien igual a tu pareja.
- Tener claro lo que te gusta y lo que no gusta: como ser humano tener muy claro cuáles son aquellas cosas que no te gustan y cuales te gustan y sobre todo en el proceso de una relación de pareja. Por ejemplo si no te gusta que tu pareja te diga sobrenombres, o que haga chistes de ti delante de tus amigos, o cuente sus intimidades a otras personas sin tu consentimiento, o beba en exceso cuando sale contigo y tiene que manejar etc.
- Poner los límites claros y evitar las confusiones: no es lo mismo que tú le digas a tu pareja no me gusta que hables de mí con tus amigos a que le digas no me gusta que cuentes nuestra intimidad a tus amigos. En el proceso de conocerse debes elegir el momento para hablar esto con tu pareja donde él o ella también tenga la oportunidad de expresar y poner sus límites claros, buscando siempre tener la mayor claridad posible en lo que se hable.
- Evitar complacer: en este aspecto hay dos puntos importantes el primero es no permitirte hacer algo de lo que dijiste que no te gusta solo por complacer a tu pareja y más cuando no estas convencido o convencida de hacerlo. Y el otro aspecto es tener cuidado con la manipulación que puedes recibir de tu pareja quien puede pedirte que como prueba de amor le permitas por una vez hacer eso que no te gusta o que use esta frase para que le perdones por algo que haya hecho. Una relación madura y responsable no necesita de la manipulación ni pedir sacrificios a la pareja.
- No tener miedo a decir que NO: cuando los límites son saludables podemos expresarlos y comunicarlos sin temor, no sientes culpa de ponerlos, ni tampoco sientes que estás haciendo algo malo al hablar de límites en la relación de pareja. Al hacerlo debes sentirte feliz porque estas dejando claro aspectos importantes para ti como persona y evitando futuros problemas y discusiones en la relación.
